Ángeles Álvarez tacha de «temeridad» y «desatino ético» la negativa de Gallardón a analizar por qué el 73% de las madrileñas con orden de protección rechaza los servicios municipales de atención

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Madrid, 27 de enero de 2011.-

En 2010 los puntos del Observatorio de la Violencia desde donde el Ayuntamiento de Madrid atiende a las Mujeres con Orden de Protección fueron abiertos 2.333 expedientes derivados desde el Punto Coordinador de la Comunidad de Madrid.

 

El Grupo Municipal Socialista tras analizar los datos de las memorias ha hecho notar que solo un 26,8% de mujeres con OP aceptan recibir ayuda psicosocial. La concejala socialista Angeles Alvarez ha preguntado en Pleno al equipo de gobierno si conoce los motivos por los que el año pasado en la ciudad de Madrid 1.628 mujeres con Orden de Protección han desistido de «recibir asistencia psicológica, seguridad y apoyo para la salida de la relación violenta».

 La concejala ha calificado de «tendencia preocupante» el hecho de que solo un 26,8% de mujeres con OP acepten recibir ayuda psico-social.

 Álvarez ha pedido en su intervención «reflexión sobre ese dato» y ha recordado que más allá de «ofrecer el servicio, la gravedad de la problemática que atiende nos tiene que comprometer a saber por qué tantas mujeres renuncian a él».

 Álvarez, en su intervención, recordó que cuando este problema no estaba suficientemente estudiado «los comportamientos adaptativos de que se sirven las mujeres para la supervivencia se esgrimían como excusa para no intervenir justificando que la víctima «toleraba y transigía con la violencia» y exigió al equipo de gobierno compromiso para analizar «los perfiles de abandono» y «conocer las causas que hacen que las mujeres no se impliquen en su proceso de recuperación y reparación del daño».

 Álvarez ha indicado que «es responsabilidad del Ayuntamiento identificar estos problemas para garantizar la eficacia de los servicios» y «una vez identificados cabe analizar y planificar soluciones». No hacerlo, según la concejala, es una «irresponsabilidad y una temeridad».

Tras ser rechazada la proposición, Álvarez ha recriminado al PP por «desligar al Ayuntamiento del compromiso social que la sociedad madrileña le exige para frenar esta barbarie».